DAROCA
Acaba de consumarse el programa de actos
confeccionado para conmemorar el 650 aniversario de la concesión del título de
ciudad, a Daroca, por parte del rey Pedro IV el Ceremonioso (o el del
puñalico).
Tiene Daroca gente ilustre que glose
su historia, sus hazañas, sus conquistas, sus gestas militares, su patrimonio
y, sobre todo a sus gentes… a las de ayer y a las de hoy. Por todo ello, por
ser una plaza tan señera y tan significativa en la historia de Aragón, acudimos
este verano al Festival Internacional de Música Antigua y conocer el ambiente
medieval con que se habían engalanado sus calles.
En cuanto al patrimonio histórico-artístico,
Daroca, desborda todas las expectativas que previamente se haya planteado el
viajero. Y, precisamente por ello, no comprendemos lo poco conocida que es esta plaza. Seguramente necesitaría un
Fundación tan potente como la de Albarracín para llevar a cabo la completa
recuperación de su patrimonio, de su economía y una adecuada proyección vital,
social y cultural de sus gentes.
A Daroca le queda un largo camino por
recorrer, bien es verdad que con el permiso de la madrastra Zaragoza que en su
prepotencia engulle, como oca, todos los recursos de Aragón.
Situada en la cuenca fluvial del
Jiloca, en el eje Calatayud-Teruel y dominando un amplio territorio ha visto
mermarse sus posibilidades conforme el territorio decrecía y se despoblaba.
Calatayud, Calamocha y Zaragoza son tres polos de atracción que tiran de ella y
la disminuyen. Por ello, Daroca, como en la Batalla de Luchente, deberá hacer
valer de nuevo sus “poderes” y remontar esta crisis que ya dura demasiado.
En publicaciones sucesivas iremos
presentando algunas fotografías de todo aquello que vimos en este aniversario.
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